lunes, 5 de abril de 2010

Ya no me fío

No me fío de ti, ya no me fío
de tu limpia sonrisa de verano,
de tu conocimiento meridiano,
ni de tu corazón grande y bravío.
-
Ya no encuentro en tu porte señorío,
ni tolero tu trato cotidiano,
ya no quiero caricias de tu mano
ni palabras de amor. Ya no eres mío.
-
Mío era el hombre que, inocentemente,
cantaba una canción, me daba un beso,
me entregaba su amor y su simiente.
-
Pero de todo aquello no ha quedado
nada, ni por mi parte; te confieso
que lo bueno de ti se me ha olvidado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario