domingo, 26 de febrero de 2012

o0o Cartas a Marcel 2 o0o

Marcel, hoy estoy triste.
El cielo está nublado cuando no estoy contigo.
Quizá siempre lo estuvo
pero con tu sonrisa seguro se encendía.

Tan sólo tú aprendiste lo que se da en un beso
y cuánto se recibe.
¡Y yo retuve tanto!
Por eso hay algo tuyo en lo que es mío,
porque tu beso vive conmigo todavía.

Mas hoy el día es triste,
y no quiero mandarte tanta pena.
Prefiero que no sepas...
Mejor romper la carta:
Sólo quiero enviarte mi alegría.

martes, 21 de febrero de 2012

o0o Cartas a Marcel o0o

Marcel, amado mío:

Cada día te hablo, cada instante;
en cada pensamiento te revivo.
¿A quién mejor que a ti puedo escribirle?
Destinatario sordo de tu nombre.

Mis palabras te tocan y te amo
tan clandestinamente como puedo;
porque sentir tu nombre es dar la vuelta,
es un pinchazo seco de esperanza,
es un comienzo de melancolía.

Porque tocar tus cosas es tocarte,
resucitar momentos;
es recobrar la paz de tu existencia,
es oler a manzana, es tu olor a desierto.

Pero ya no te sueño.
¡Siempre despierta y viva!
¡Siempre contigo!

domingo, 12 de febrero de 2012

Quizá fuera de noche

Quizá fuera de noche:
se te abrieron los ojos de mochuelo,
apartaron la noche de mi rostro
y a tu antojo abrazaste
mi cuerpo con tus alas.
-
Y ya, sin darnos cuenta,
todo volaba, sí, todo volaba;
todo flotaba alrededor del nido
y una mano divina nos mecía.
-
Quizá fuera de noche,
porque sólo se oían nuestras lenguas
hablando un mismo idioma;
Y en el aprendizaje de los cuerpos,
mientras tu descubrías mis contornos
yo dejaba caer mis caracolas
por el papel en blanco de tu sexo.
-
Y ya, sin darnos cuenta,
todo era nuestro, sí, todo era mío,
todo era tuyo dentro de tu abrazo
y una mano divina nos tapaba.