o0o La calle de mi vida o0o

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La calle de mi vida
se estrecha cuando llega
al cruce con la tuya.
Está llena de charcos y es tranquila;
apenas pasa nadie.
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Tiene casas de pueblo y amapolas.
Con un cierto regusto madrileño
se eleva un rascacielos  de olvidos y de penas.
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Mi casa es simple, cómoda y pequeña.
Está orientada a ti, siempre a tus ojos,
y me sorprende siempre con sus cajas,
tan llenas de pasado.
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Tiene vistas al mar que se me bebe
y en mi balcón se mueren las palomas.

o0o Limpieza o0o

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Tengo la casa llena
de tantas cosas tuyas, y tan nuestras...
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Pero hace pocos días
compré una estantería en el IKEA.
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Es tan nueva, tan grande y tan bonita
que necesito sitio y he pensado
que voy a hacer limpieza.

o0o Redención o0o

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Tú que todo lo puedes, dame aliento;
Te rezo pero tú sólo me pruebas
y me acercas el agua y  te la llevas,
y me dejas con sed y sin sustento.
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Tú que todo lo das, dame otro intento,
para que vuelen mis palomas nuevas.
Pero no llegarán: tanto te elevas
que de rezarte tanto me arrepiento.
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Tanto me empeño y tanto se me impide
que tu rotundidad clara se mide
en el cansancio de mi abnegación.
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Yo te beso en la cruz, yo te mendigo,
te suplico, te niegas, te maldigo:
¿Cuál es el precio de mi redención?.

o0o Soneto primero de mil o0o

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A tu cuerpo me ato y me desato
y te digo te quiero y no te quiero.
Si no te digo que te quiero muero
pero si digo que te quiero lato.
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A tu boca la beso y la maltrato
con un desplante seco y altanero;
salta la chispa dentro del brasero
y me acerco a tu fuego y me arrebato.
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A tu vida me uno y me desuno.
Cuanto tiene el amor de inoportuno
lo tiene de propicio.
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Y por tu corazón, sólo me asomo
por la primera parte de su tomo,
donde todo es inicio.

o0o Amarte de lejos o0o

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Puedo amarte de lejos tanto y todo,
y recorrer tu cuerpo liso y blanco.
Con los ojos tapados de los ciegos
memoricé tus bosques, tus colinas...
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Puedes estar tan lejos y a mi lado
juguetear y cortejar mi oído;
Pero tu voz me toca y me atraviesa
y me levanta olas y me inflama.
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Tú aceleras el mundo, eres la vida;
Cuando me acabo  tú me das aliento:
Ya no sabré vivir de otra manera.
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Tú detienes el tiempo: se desmaya.
Así aprovecho para ser más tuya,
ser infinita: en  ti no me termino.

o0o Mañana no estaré o0o

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Mañana no estaré, ya no me esperes,
que ya no volveré, ya me termino.
Te doy mi amor con este pergamino
y con el testamento mis enseres.
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He disfrutado todo cuanto eres:
tomé tu cuerpo, me bebí tu vino
y me embriagué de tí. Sigue el camino,
que yo me dormiré sin que te enteres.
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Deja que me prepare la maleta:
llevo papel y lápiz, la carpeta,
tengo tus notas, tu fotografía... .
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Ya me puedo morir. ¿Me das un beso?
Dame un minuto mientras me confieso
y me despido de tu compañía.

o0o Desde mi corazón o0o

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Desde mi corazón hasta tu espalda,
y sin poder mirar a donde miras
y sin poder soñar lo que tu sueñas,
salen vapor, cenizas, polvo y lava.
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Hoy no pronunciaré tu nombre entero:
Estoy lejana como la masía,
y tan adentro como una canción,
y tan abierta como los claveles.
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Sé que nacen los versos de mi vientre,
pero el camino nuestro está salvaje,
y van  pisando tus cristales rotos .
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Yo te escribo y te guardo: yo te pienso.
La cárcel del amor es abandono;
La tumba del amor es el olvido.

o0o Te esperaré o0o

Te esperaré de mármol y vacía,
el musgo nacerá por mi cadera;
así te firmaré toda la espera
que tenga que valer tu compañía.
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Te espero estatua, muda, quieta, fría;
ojos de piedra, corazón de cera.
Parece que mi boca desprendiera
lascas de pena y polvo de apatía.
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Y me reservaré todo el aliento,
toda mi vida y todo lo que siento
hasta que habites en mi cuerpo helado.
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En ese instante,  solos,  frente a frente,
me entregaré a tu sueño ciegamente
y nos desnudaremos del pasado.

o0o Te quiero marinero o0o

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Te quiero, marinero que atracas en mi orilla,
y pescas mi cadera con una  redecilla.
Yo quiero ser el beso que te toca y se va;
Si beso tus anzuelos, dime, ¿Qué pasará?
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Te vivo tan de lejos... . Hasta me maravilla
que pintes de colores bermejos mi mejilla,
que escribas por mi espalda lo que está más allá,
y pongas a mi lado lo que nunca vendrá.
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Y te tengo poeta, tan dulce, tan esquivo,
y tan fugaz y tan intensamente vivo,
que eres una  mañana, un rayito de sol
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Suenas lento, vibrante; hablando en si bemol,
tu no tan sostenido en mi acorde de si,
que si alcanzas mi nota me romperás a mí.

o0o Aunque sea mentira o0o

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Parece que el calor no fue bastante
y se nos consumía el sentimiento
entre desidia y entre aburrimiento,
perdí mi cómplice, perdí mi amante.
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No sé dónde estarás, te busco errante,
me evaporo en el mundo y no te siento
y me estallo de rabia, me reviento
y me termino, amor, sin habitante.
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¿Vendrás corriendo para quien te espera?;
que aprendí la lección; clávame entera
la furia de tu ira.
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Pero regresa, dime que me quieres,
que sigo siendo todas las mujeres,
aunque sea mentira.

o0o Por donde empiezas o0o

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Ya puede ser el día  luminoso
o gris, pero amanece cada día,
y ni la plenitud del mediodía
le da luz a mi rostro; es angustioso.
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Mi día es viejo, es triste, es andrajoso;
mi cuerpo es un desmayo; te diría,
que sólo encierra mi melancolía
hasta que empiezas, hombre, deseoso.
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Por donde empiezas, donde te terminas,
todo mi cuerpo invades, contaminas
cada trozo de mi, cada hondonada.
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Donde terminas, y por donde empiezas,
vas haciendo algodón mis asperezas
y me consume, amor, tu llamarada.